Mi nombre es Gildris Scanfort, tengo 25 años, y esta es la historia de cómo un trato loco con mi prima Brittney Cooper me cambió la vida. Para entrar en contexto, tengo una prima que se parece mucho a mí. Ella se casó con un millonario, lo que la llevó a renunciar a su vida desenfrenada; sin embargo, cuando su esposo tuvo un accidente, ella me buscó, después de años sin vernos, me propuso que yo la reemplace para que ella pueda ir al extranjero a vivir su vida despreocupada, dándome como beneficio una enorme suma de dinero. Yo no estoy muy convencida de ser participe de esta loca idea, pero mi madre está muy enferma y necesito el dinero, así que acepte.
Leer másCapítulo 38. Necesidad. Ella le da un corto beso y Bastián abre los ojos; acercándola más a sus labios, profundiza el beso abrazándola. —¿Por qué estás despierta? —pregunta él acariciando su mejilla. —Estaba en el baño. Responde acomodándose sobre su pecho. Bastián la abraza serio, mirando a la nada; la acaricia, sin poder conciliar el sueño. Después de escuchar cada palabra, no puede dejar de pensar en que ella solo ha sido suya y, aunque ella intentó borrarlo lavando la sábana mientras lo creía dormido, la sangre pegada al abdomen de Bastián no deja espacio a duda: ella le dio su virginidad; como ella dijo, fue suyo, su único hombre, del primero que se enamora, y eso cala en la mente de Bastián y en su corazón: suya y de nadie más. —Te prometo que no te vas a arrepentir de darme tu corazón, Gildris Scanfort. Bastián le da un beso en la frente, acariciándola mientras ella permanece dormida. * Ha sido una noche larga, única e inolvidable. Bastián despierta casi a las
Capítulo 37. Pasión desbordada. Bastián sigue con sus besos, la acomoda besando su muslo y luego sigue hasta llegar a su feminidad, a la que le da un corto beso, sorprendiéndola. Ella se acomoda en sus codos para verlo, su mirada es de curiosidad. Bastián lame la zona sin dejar de ver su expresión; ella frunce el ceño débil, él sigue suave, lamiendo la zona con más intensidad, lo que la hace jadear. Gildris se estremece, su cuerpo tiembla, no puede contenerse. Ella se sostiene el seno derecho mientras lo mira con el ceño fruncido, mordiéndose el labio, sonrojada y ansiosa por lo que él causa en su cuerpo. Rendida, ella se tumba a la cama, aferrándose a las sábanas. Bastián intenta aprovechar y meter uno de sus dedos en ella, pero al Gildris sentir la presión, retrocede. Bastián nota que ella rápidamente toma su posición inicial muy nerviosa, pero no le dice nada; lo toma de la mejilla y lo atrae hacia ella, y lo besa. Bastián se acomoda; él frota su miembro sobre su clítoris p
Capítulo 36. Noche especial. Una noche realmente agradable, entre plática animada y risas; él la hace sonreír, mostrar esos hoyuelos que la caracterizan, lo que lo tiene fascinado. —Me alegro de que te haya gustado la comida, aunque sé que no soy perfecta; con tantos ingredientes me sentí un poco inquieta; lo haré mejor la próxima vez. —Me encantó, muchas gracias. Nadie más que los sirvientes había cocinado para mí antes; esto realmente ha sido un gesto único. —Me alegra ser la única que haya cocinado para ti. Tengo un regalo. —Ella toma las cajas de la silla de al lado y las pone frente a él. —Ábrelos —dice, jugando con la copa en su mano, a la que le da un sorbo, y lo enfoca a él con una ligera sonrisa nerviosa. Bastián empieza abriendo la primera caja; en ella hay tres libros. Él se sorprende, esperaba todo menos libros. —El arte de la guerra… —Él sonríe ligeramente. —Viktor Frankl, El hombre en busca del sentido… Excelentes libros. —Los cinco lenguajes del amor. —Ell
Capítulo 35. Aniversario Salir de casa se convierte en agonía; Bastián no puede evitar revisar las cámaras para vigilar a Gildris, saber si ha pedido que todos se tomen el día libre por el intercambio o si realmente tiene planes. Revisando las cámaras, nota cómo ella despide al personal, toma el control y enciende la TV de la sala colocando canciones animadas; ella baila mientras se mueve recorriendo todo el comedor. Bastián sonríe al ver que ella regresa con los implementos de limpieza y personalmente aseo el piso, dejándolo brillante, pero eso no es lo que lo tiene distraído, sino verla disfrutar limpiar el lugar mientras baila moviendo su trasero sensual con la canción de Rihanna—"Rude Boy". No deja de hacerlo sonreír. Ella organiza todo, mete a lavar un mantel, se sube a una silla y baja cosas del almacén, trae bolsas de su habitación y se mueve al jardín donde corta rosas frescas y luego en un bol las saca en pétalos de rosas. Ella extiende el mantel rojo, pone los portapla
Capítulo 34. Sorpresa. Bastián se tensa, toma un vaso de agua, tratando de controlar sus emociones. Siempre fue ella, siempre debió ser ella; ahora el destino la trae a su vida de esta manera, cuando todo está complicado, cuando ninguno puede ser completamente transparente, real; por eso su miedo, por eso todo lo que hace. ¿Por dinero? —¿Su madre murió? —No, al parecer la situación económica estaba bastante complicada, dicen que los vecinos les daban de comer, que él dinero no les alcanzaba para subsistir y por eso se fueron, otros me decían dijeron que la necesidad los consumía y que se fueron con una señora rica que fue a buscarlo en una camioneta hace unos meses, seguir la pista hasta la casa para ver si podría encontrar más, abrí la puerta con una llave debajo del matero y vi que realmente los vecinos no exageraban, no tienen comida, medicamentos regados, el lugar es muy humilde, encontré facturas medicas por pagar, cantidades de dinero, solicitud de embargo del banco,
Capítulo 33. Resistir el deseo. Al ver que él la saca de la ducha y la sube sobre el mesón del lavamanos, Gildris se aleja rápidamente, intentando recobrar el aliento. —Espera, espera, por favor, Bastián, por favor. —Bastián la mira confundido. Ella intenta calmar sus emociones sujetándose del pecho. —¿Qué pasa? ¿Acaso no lo deseas? ¿No te provocan nada mis besos? ¿Mis caricias? —Sí, sí, Bastián, todo, contigo siento todo, eres un hombre increíble, me haces sentir muchas cosas, pierdo el control contigo, yo me siento débil cuando me tocas, cuando me besas; tú tocas todas mis fibras… —Bastián la interrumpe. —Me dirás, ¿soy yo, no eres tú? —¡Bastián…! —exclama suplicante. Ella lo mira impaciente, se acerca besando su pecho, sus labios, con aquella pasión que los envuelve. —Te deseo, tú eres irresistible, el hombre perfecto; yo quiero, deseo, pero no puedo, no puedo. —Algunas lágrimas escapan de sus ojos. Bastián la toma del mentón y la mira fijamente. —¿Por qué? ¿Qué es
Capítulo 32. Tentación. Emmy la mira, notando la sinceridad con la que se expresa, la manera en la que habla de su nieto; todo esto la inquieta. —Dime, Brittney, ¿ya tienes planes para tu aniversario con Bastián? Gildris levanta la mirada desconcertada, en shock. ¿Aniversario? ¿Cuándo es su aniversario? —¿Aniversario de bodas? —Así es, querida, ¿acaso no sabes que formalmente tendrá dos años de casada con mi nieto en dos semanas? —Sí, sí, por supuesto que sí, es solo que sí tengo planes; de hecho, prepararé una cena en casa. —¿Esta vez no harás una gran fiesta por todo lo alto? —No, me gustaría algo más íntimo, es nuestro aniversario, no es una ocasión especial para nosotros, una gran fiesta no sería lo adecuado, no es que sea una fecha común o un cumpleaños; quiero cocinar para él. —¿Quién eres? —pregunta la mujer, tomando su mano. Gildris se asusta, la mira nerviosa, confirmando lo que Emmy está pensando, pero no la delata del todo; se ríe ampliamente. —Esa id
Capítulo 31. Solución al problema. Dos semanas después. En medio del caos, ella trabaja arduamente por intentar resolver el desastre que Brittney a provocado, con esto, con todo lo que Gildris a confirmado, lo único que le deja saber es que Brittney no se acercó a Bastián porque le gustara, porque estuviera enamorada, lo hizo con claras intenciones, conociendo a Brittney, jugó su papel de ser alguien más frente a él, se gano su cariño, su confianza, es imposible que un hombre tan inteligente como él, no haya deducido la traición antes, quizás si está enamorado de su esposa, quizás él si la ama, por eso a pesar de todo a dejado pasar tantas cosas por alto, confiando en ella, pero ella lo lástima, lo hiere, no deja de pensar que Brittney a tenido mucha suerte, realmente la ambición no la a dejado ver lo que tiene frente a ella. Gildris no puede dormir; ella admira a Bastián dormido a su lado, ella lo acaricia suave en la mejilla y le da un corto beso en los labios antes de levan
Capítulo 30. Trabajo en equipo. Tras recibir la pila de documentos, Gildris se encierra, Bastián la observa desde su oficina, ella organizando todo por fechas, todo tan pulcro, llenando una pizarra con apuntes, comiéndose libros con una concentración impactante, incluso su padre está en shock al verla trabajar tan distante de todo, como si nada a su alrededor importará más, sus gestos de molestia, la manera en que se toca la cien, como muerde el bolígrafo, como contonea sus delicados dedos sobre la taza de café con leche entre sus manos sin despegar ojo de lo que hace, esa manera sutil con la que moja sus dedos en saliva para pasar la hoja y la manera coloca y dulce de rodar los ojos con fastidio al ver lo que aparentemente le molesta, demostrando que lo que ve le molesta. —¿Qué le irrita tanto? —pregunta Leo, enfocando a su hijo, que la mira distante, desconcentrado. —No lo sé —responde dedicándole una última mirada a la mujer que enmarca cada libro dejando largos resúmenes e