El rostro de Rubí decayó en un instante. Mirando a Marcia, dijo con voz indiferente: —Marcia, ¿qué travesuras estás planeando ahora? ¿Olvidaste la lección anterior?
Rubí ya le había enseñado una lección después del incidente anterior, pero Marcia aún no tenía la intención de arrepentirse en absoluto. Rubí no sabía por qué Marcia de repente se volvió tan valiente, y era realmente desconcertante.
—Rubí, no quiero hacerte daño. Realmente solo quería verte hoy, así que por favor no me rechaces. —Marcia sonrió y miró a Rubí con fingida sinceridad, luego dijo con una expresión seria en su rostro: —Ahora eres la esposa de Marcus, así que tener una buena relación contigo me beneficiará. Mi querida hermana, ¿cómo podría molestarte?
Las palabras de Marcia tomaron a Rubí un poco desprevenida. Después de un momento de silencio, miró a Marcia y dijo: —¿Cómo entraste?
No creía en lo que había dicho Marcia. ¿Cómo podría haber venido hasta aquí si no estaba tratando de causar problemas? Ella debía te