Mundo ficciónIniciar sesiónCamelia
Tengo recuerdos muy nítidos de aquellos días luego de regresar a mi país natal, se grabaron en mí con la precisión de una fotografía impresa: nítida y silenciosa. A pesar de que utilizaban calmantes para relajarme y estuve dormida la mayor parte del tiempo, serán días que nunca olvidaré. Ni el luto a mi pequeño bebé y por alejarme de ese hombre al que tanto amé.
Un luto sin funeral o despedidas se acomodó dentro de mí, como un parásito que no pide permiso. No era odio lo que sentía por Adrien, pero sí rencor y remordimiento, germinando con mayor fuerza en mi interior. Una punzada que ni las palabras conciliadoras de Alexander lograban calmar. Tal vez él no tuvo culpa, pero… ¿y si todo esto pudo evitarse?
Mi bebé, el que aún habitaba en mi vientre, no tendría com







