POV DE ISABELLA
—Camille me llamó cuando estaba en la oficina —murmuro mientras comienzo a explicarle mi versión de la pesadilla—. Me dio dos horas para conseguir el dinero. —Me encojo de hombros—. Tenía que irme y esa era la mejor excusa.
La boca de Alexander se convierte en una dura línea.
—Y luego despistaste a Sawyer. Él también está furioso contigo.
—¿También? —También. Igual que yo.
Le toco la cara con cuidado y paso los dedos por su barba. Cierra los ojos y apoya el rostro en mis dedos.
—No te enfades conmigo, por favor —le susurro.
—Estoy muy enfadado contigo. Lo que hiciste fue algo monumentalmente estúpido. Casi una locura.
—Te lo he dicho, no sabía qué otra cosa hacer.
—Parece que no te importa nada tu seguridad personal. Y ahora ya no se trata solo de ti —añade enfadado.
Me tiembla el labio. Está pensando en nuestros pequeños.
Las puertas se abren, lo que nos sobresalta a los dos, y entra una mujer afroamericana que lleva una bata blanca sobre un uniforme gris.
—Buenas n