Narrado por Fatima Hneidi:
Hay algo muy importante que debes saber.
Lo digo en un susurro, pero el silencio que sigue es ensordecedor. Mi abuela me mira con los ojos abiertos, expectantes, como si ya supiera que lo que voy a decir va a cambiarlo todo. Y lo va a hacer. No puedo seguir callando. No puedo seguir fingiendo que estoy entera, que estoy fuerte, que todo esto es parte de un plan que puedo controlar. Ella tiene que entender porqué estoy así.
—Estoy embarazada, Dana. —digo en voz muy bajita.
Dana se queda boquiabierta. Literalmente. Su boca se abre, pero no sale ningún sonido. Se pone de pie como si el sofá quemara, como si necesitara distancia para procesar lo que acaba de escuchar. Mira a Zayd, que sigue de pie, y luego me mira a mí. Su rostro es una mezcla de incredulidad, confusión y algo que no sé si es decepción, jamás mi abuela me había mirado de ese modo.
Zayd se sienta frente a nosotras, con calma. Yo no puedo mirarlo. Me siento avergonzada de mí misma. No por el e