56. EN BUSCA DE CYNTHIA
BLAIR
Habían atacado la manada cuando se retiraban ya los invitados.
Los guerreros estaban movilizados, pero fue tan rápido y directo a la mansión del Alfa que no tiempo tuvieron de acercarse desde las fronteras.
Sin Rhett ni el Beta presente para comandar, fueron sorprendidos y sin guía.
Dante aulló profundo en cuanto atravesó las montañas que colindaban con su manada en el valle.
Aullidos replicaron de regreso.
Corrió con lobos que lo seguían a su lado, estoy segura de que dándole reportes a Rhett.
Yo solo me aferraba a Dante, queriendo pasar desapercibida.
Definitivamente, esa barrera ya no estaba frente a mis ojos y muy profundo en el pecho me carcomía las sospechas de que guie a Cassidy a algo que no debimos tocar.
Cuando salimos directo a la parte trasera de la mansión, el olor a sangre me golpeó hasta a mí.
Cuerpos despedazados estaban en el jardín, de algunos invitados, pero la mayoría de los guerreros de guardia.
Dante se detuvo y bajó su postura para que descendiera.
No perd