Sebastián abre sus ojos como platos, y su reacción fue mirar la expresión de Anastasia en su rostro. La cual está sonriendo con amargura.
—¡Eso no puede ser posible!— negó él con la cabeza
—¡Lo es! ¡Aquí está la prueba!— Cáceres se apresura a abrir el sobre para dárselo a Sebastián
Sebastián agarra el papel, y afectivamente está el nombre de Cáceres y en el resultado, "positivo" el alza su mirada y la fija en Anastasia
—¡Debe haber un error!— se atreve a decir Sebastián
—¡¡No lo hay!! Es real maldición, y eso pasa cuando una pareja tiene mucho sexo. Tú y yo tenemos mucho sexo— lo señala Cáceres
Anastasia está sin palabras, ella camina para regresar con su hija. —¡Ana..!— susurra, pero Cáceres no lo deja irse y lo toma de la mano
—¿Cuando vas a entender que ella no quiere estar contigo? ¡Olvídate de ella! Iniciemos una relación estable, estás envejeciendo, yo igual, ahora tenemos un bebé fruto de toda la pasión, y amor de mi parte, no vuelvas a cometer el mismo error Sebastián, de q