Tayron bebió un par de copas de whisky mientras devanaba sus sesos, intentando hallar la mejor forma de acercarse a Vivian.
Ella no lo quería ver se lo había dejado muy claro, pero era su última oportunidad o podría perder RY International, Inc.
El miedo lo invadía, y entonces se enfoco en la fotografía que todavía sostenía en sus manos.
>>Su hijo…Claro<<
Sintió que su mente se iluminaba, aunque posiblemente ella lo odiara más por ello, tenía que intentarlo, poner todo en el asador. Así que tomo la bocina de su teléfono de escritorio.
—Carlos— llamo.
—Si señor.
—Averigua en qué colegio o escuela, fue registrado el hijo de Vivian y tiene que ser para Ya!.
Carlos abrió sus ojos, no entendía que iba hacer su jefe, le parecía algo inapropiado, pero era mejor no refutar.
—Claro señor, lo haré de inmediato.
Después de varias horas llamando buscando información, Carlos acudió a la oficina, dónde Tayron se enfocaba en algunos contratos pendientes.
—Señor, el n