Capítulo: Sembrar caos.
Martín llegó a la empresa con el corazón latiendo desbocado.
Al entrar, fue recibido por un empleado que le indicó que todo estaba listo para la presentación.
La colección que pronto sería lanzada al mercado iba a ser vista por Manuel antes que por nadie más.
Eso lo tenía estresado, no usaría los mejores materiales ni los mismos en las piezas de venta de clientes, porque necesitó ahorrar costos para poder tener una buena utilidad debido a las perdidas en su gestión de CEO, sin embargo, esto no debía saberlo nadie, menos su hermano mayor que podría usarlo como un arma para destruirlo.
—Manuel podrá ver la colección antes que todos, y la aprobará. Nadie se dará cuenta de los cambios, señor Montalbán —dijo el empleado, tratando de infundirle confianza.
Martín suspiró con alivio, al menos eso lo calmaba un poco.
Sin embargo, una sombra de inquietud lo acompañaba.
Sabía que el éxito de esta colección significaría mucho para la empresa, pero también sabía que un paso en falso podría hacerle