96. Yo me encargaré.
Rune Montenegro
Llegaba al hospital donde Eloise me dijo que estaba verificar los cuerpos que se encontraba llorando de manera frenética. Los aullidos perturbadores me indicaron claramente lo que sucedía... experimentaba una sensación de frío.
—¡Donde esta mi hijo! ¡Mi hijo!
Eran desgarradoras las lágrimas que derramaba. Con rapidez me acerque a ella abrazándola, temblaba, sus gritos ensordecedores me dejaban entender que había perdido su alma.
—Eloise, salgamos. No podemos perder tiempo.
Pensaba con la cabeza fría pues en ese momento debíamos movernos. Sin dudarlo, decidí llevarla al coche mientras contactaba a mi único socio en España, quien me informó que Lilith había tomado un vuelo a California, lo cual me generaba preocupación. Lilith, conocida como la siniestra flor de la mafia, la mamba negra del mercado negro, se dedicaba al tráfico de seres humanos en lugar de involucrarse en el comercio de drogas. Disfrutaba intensamente del dolor, y cuanto más intenso, más lo disfrutaba