Seduciendo al rey de la mafia 43. Desayuno
Recogía mis pertenencias de mi habitación, por petición de mi madre me pidió que fuese un tiempo a Suiza para intentar pensar que hacer. Además, una empresa suiza me propuso realizar una pasantía remunerada con una oferta mucho más competitiva que la de Rusia. Colocaba varias de mis bufandas en mi maleta cuando un toque en mi puerta me hizo elevar el rostro, era Dimitrik.
—¿De verdad tienes que marcharte, Krolik(conejita)?
Sonreia ligeramente. Dimitrik había empezado a sentirse más cómodo al venir a verme con mayor frecuencia a pesar de que mi padre aun le decia mafioso criminal, que no me dejaria con el. Tambien, a pesar de que todavía tenía dificultades para caminar, los especialistas afirmaban que solo eran efectos residuales y que pronto habría una mejoría. Consideraban que era un caso excepcional, ya que logró dar sus primeros pasos antes de cumplir un año.
—Solo serán unos meses.
—No me gustan las relaciones a distancia.
Al oírlo, esbocé una sutil sonrisa con mis labios.
—¿Lo d