PROTEGIDA

La mañana siguiente llegó envuelta en un aire diferente. La empresa seguía siendo la misma: teléfonos sonando, teclados repiqueteando, pasos acelerados sobre el suelo de mármol. Pero para Stella, algo había cambiado. Quizá era la forma en que Cyrus la había mirado anoche, sin juicio, sin dureza. O tal vez la tranquilidad inusual que había sentido mientras comían.

Cuando lo vio llegar esa mañana, saludando con un leve gesto de cabeza, sintió una punzada de nervios que no supo cómo explicar. Se obligó a concentrarse en los documentos que tenía sobre su escritorio, tratando de ignorar el modo en que él se detuvo unos segundos más de lo normal junto a su mesa antes de entrar en su oficina.

—Buenos días, Stella —la saludó con un tono más amable de lo habitual.

Ella levantó la vista y respondió con una voz baja, pero sin frialdad.

—Buenos días, señor Leroux.

Él arqueó una ceja, sonriendo con ligereza.

—Cyrus. Te dije que me llamaras Cyrus.

—¿En la oficina? No lo creo.

—En la oficina
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP