Lumina

Observé aquel intercambio entre madre e hijo como si fuera un partido de tenis, cada comentario punzante viajaba de un lado al otro mientras yo me encontraba sentada en la tribuna, impotente.

El plan de Silvia se hacía más claro por momentos: reemplazarme por Sophia para tener una nuera adecuada, una que realmente pudiera soportar.

—Madre, ellos deben irse —dijo Xenois con firmeza, negándose a ceder. Era una de esas pocas veces que lo había visto enfrentar a su madre por algo que me concernía, ya que a menudo, dejaba pasar las cosas para mantener la paz—. Esto es inapropiado, y lo sabes.

—¿Vas a permitir que tu esposa controle quién es bienvenido en mi casa, Xenois? —la voz de Silvia se endureció y apretó el puño dándome una mirada llena de un odio absoluto que me puso nerviosa—. ¿Vas a dejar que sus celos e inseguridades dicten cómo funciona esta familia? ¿Es ella el sostén de esta familia, Xenois? Claramente estás siendo controlado por ella y ni siquiera te das cuenta.

—Qué p