Capítulo 21; Me voy y nada puede impedirlo.
Victoria, entro a la habitación con cuidado, caminó despacio hasta la cama, se le cortó la respiración al verlo allí... dormido y totalmente vulnerable. Ese era el hombre que amaba y eso no cambiaría por nada del mundo, pero... no podía perdonarlo, lágrimas brotaron de sus ojos, las secó con suavidad, se inclinó y depositó un ligero beso en aquellos sensuales labios.
Brailon se movió y Victoria lo vio sonreír en sueños, se quedó inmóvil durante unos segundos, esperando lo que sucedería, pero Brailon sólo se giró hacia el otro lado y siguió durmiendo.
Brailon despertó al rededor de las ocho de la mañana, nunca acostumbraba a dormir tanto, pero estaba realmente agotado, habían Sido muchos días de arduo trabajo, además de la horrible noche anterior.
Después de una ducha, se vistió y bajo a desayunar.
—Hola Sophie, buenos días.
—Buen día. ¿Desea desayunar?
—La verdad no estoy de humor, Sophie. Solo tomaré café.
—De acuerdo, señor.
—¿La señora ha llamado?
—No. La señora volvió muy t