Capítulo 75 : Respirar No Es Vivir
Los últimos días habían traído algo parecido a la calma en la obra del Cinco Estrellas.
Nicolás y Anahir trabajaban codo a codo, recuperando el ritmo, el orden, y lo más importante: la confianza del equipo.
La auditoría seguía en curso, meticulosa, sin pausas.
Y aunque los informes aún no estaban listos, lo que se veía en el ambiente era claro: la obra se movía, avanzaba, respondía.
El liderazgo firme de Anahir y la estrategia silenciosa de Nicolás le devolvían el alma a los pasillos de cemento y acero.
Pero del otro lado… Fátima Lombardí no respiraba igual.
Santiago Durán había accedido a invertir.
Pero con condiciones.
Le dio un solo mes.
Treinta días de oxígeno.
Y nada más.
Fátima lo sabía: no era confianza. Era un experimento.
"Si les va bien, hablamos", había dicho Santiago, sin promesas, sin halagos.
Y si bien ese dinero le dio un pequeño respiro, no le alcanzaba para dormir tranquila.
Porque además, Santiago exigió una supervisión directa.
Y S