Capítulo — El Milagro de Julián
La madrugada en Colonia estaba tranquila, como si la ciudad entera se hubiera detenido para esperar un acontecimiento especial. En la casita recién renovada, Julia se movía inquieta en la cama. Sus manos acariciaban el vientre mientras sentía esas contracciones intensas, diferentes a las anteriores.
—Ale… —susurró con un hilo de voz, despertando a Alejandro, que dormía junto a ella en  a la cama.
Él abrió los ojos de golpe, como si hubiera estado esperando ese momento desde siempre.
—¿Qué pasa, Juli?
Ella lo miró con los ojos brillantes, entre miedo y emoción.
—Es el momento… nuestro hijo quiere nacer.
Alejandro sintió un vuelco en el corazón. Le acarició la cara y se inclinó para besarle la frente.
—Respirá conmigo, mi amor. No voy a dejarte sola.
Mientras Guillermo y Lili llegaban a la casa para llevarlos al hospital, Alejandro sacó el celular y con manos temblorosas escribió en el grupo familiar.
“Papá, mamá, Juli entró en trabajo de parto. Está por