Gracia
No podía imaginar qué quería decir realmente Tristán con destruir a Esteban esta vez.
Pero en los días que siguieron, llegué a conocer la profundidad de sus palabras y amenazas.
Primero, un empleado de la Corporación Calderón se convirtió en denunciante. Reveló los tratos bajo cuerda que les habían permitido ganar la mayoría de los contratos por los que competían.
Sus acciones se desplomaron tras la emisión de la noticia.
Pero no se detuvo ahí. Varias personas se presentaron al día siguiente con acusaciones de acoso laboral.
Al tercer día, otro ejecutivo decidió revelar que algunos de los materiales utilizados en la construcción de los proyectos Calderón eran de mala calidad, lo que podría convertirse en el colapso de un edificio bajo cualquier condición de tensión menor.
Cada día veía cosas nuevas en el canal de noticias. Cargos por corrupción, malversación, acoso, y tanto más que ni siquiera podía seguir el ritmo.
Demanda tras demanda, secreto tras secreto... todo comenzó a hu