65. Más vale tarde que nunca
65. Más vale tarde que nunca
Garrett miró su reloj con impaciencia por vigésima vez en los últimos sesenta minutos. Se maldecía por no prever y creer que viajar el mismo día de la boda de Nova era una buena idea. Tampoco es que podía hacer mucho, había estado en una reunión de trabajo hasta el mediodía porque a su jefe se le antojó no darle permiso. A pesar de que lo había solicitado con tiempo y de que le había dicho que sí.
Y no contento con tenerlo atrapado entre las cuatro paredes de la oficina, cuando la mentada reunión terminó, lo envió a entregar unos documentos al otro lado de la ciudad que, según él, eran urgentes.
Cuando el avión finalmente aterrizó en San Antonio, el cielo estaba tan oscuro como su estado de ánimo. ¡Ni siquiera le había dado tiempo para cambiarse de ropa! Solo esperaba que Nova no se sintiera defraudada y que, a pesar de su ausencia, disfrutara de su boda.
Aunque personalmente, no se perdonaría haberle fallado de nuevo. Nova y Nikki eran toda su familia. Y