35. ¡Me lo va a desgastar!
35. ¡Me lo va a desgastar!
Nova recibió las rosas con la misma amabilidad de todos los días, pero con un sentimiento totalmente distinto. Le agradeció a Lucas por su amabilidad, cerró la puerta y volvió a la cocina para encontrar a Knox y Nikki muy sonrientes, picando los tomates y la cebolla.
—¿Qué es lo que están haciendo ustedes dos? —preguntó. Colocó el ramo de rosas en el florero, le puso un poco de agua y alimento para mantenerlas frescas y hermosas tanto tiempo como fuese posible.
—Nada, mamita. Papi y yo nos estamos dando prisa, no puedo llegar tarde a la escuela —responde Nikki, acomodándose un pequeño gorro improvisado con el trapo de cocina.
Ni siquiera deseaba pensar de quién había sido la idea.
—¿La llevarás al colegio? —preguntó Nova, amarrándose un delantal a la cintura y calentando la sartén para el omelette.
—Me encantaría llevar a Nikki al colegio —aceptó. No quería demostrar lo emocionado que se sentía, pero estaba cansado de ocultar todo el tiempo sus emociones.
—¡