Dante vuelve a apartarse de ella acercándose al gran ventanal, la oficina era muy pequeña ante su presencia y Alicia sentía que en poco tiempo podría quedarse sin oxígeno.
— A los periodistas les encanta el Morbo, tu mejor amiga aún no es señalada y El amor de tu vida esta jugando a la Víctima.
— Pues que sigan con aquel juego, seguiré aún callada y tu vas a ayudarme para que la Empresa no caiga a causa de las acusaciones qué están levantando.
— ¿Quién te ha hecho creer que yo voy a ayudarte?
Alicia sabe que estaba jugando con fuego, pero ella era consciente de que ya estaba en este laberinto y que para salir de ella debería de incursionar hacia lo desconocido — Mira Morgan, yo soy un hombre de negocios, quizás pueda considerar tus palabras, pero al final siempre debe de haber beneficios para mi, y definitivamente no veo ningún beneficio que tu puedas darme.
La mujer se había sonrojado ante la intensa mirada que Dante estaba dedicando a su persona en ese preciso momento.
— Dejaré que