Punto de vista de Héctor
—En la que es tuya...
Un tono rosado se apoderó de sus mejillas mientras se sonrojaba bajo mi intensa mirada.
Algo se había activado dentro de mí al ver sus manos sobre ella, mi lobo empujaba con más fuerza para que completara el ritual de marca, para que la reclamara.
Pero no podía forzarla.
Todavía tenía que pasar por su primer ciclo de celo, y entonces le costará mucho más negar el vínculo entre nosotros. La había marcado, solo era cuestión de tiempo antes de que mi marca como Alfa le provocara ese primer celo insoportable.
La observé mientras ella tomaba la toalla y caminaba hacia el baño, colocándola en un cesto de ropa sucia. Ver su sangre ahora como manchas en la toalla hizo que mi cuerpo se tensara, con ganas de matarlo.
Presioné el enlace mental con mis guerreros que lo tenían en las celdas.
—¿Alfa? —respondieron al unísono.
—¿Está hablando?
—No, Alfa, ni una palabra.
—Bajaré enseguida.
—Héctor... —La mano suave de Carla se posó en mi mejilla, el estal