Mundo ficciónIniciar sesión
Mi biblioteca
  • PARTICIPA Y GANA Concurso
  • Português
  • Para autores
    Recompensas de autoresPara autores
  • Ranking
  • Navegar
    Todos
    Paranormal
    Ciencia Ficción
    urbano
    Hombre-lobo
    Clásico
    Suspenso
    Oriental
    Historia
    Otros tipos
    Romántica
    Fantasía
    Personajes Sobrenaturales
    Acción
    Realista
    Mística
    Chick Lit
    LGBT
    Guerra
    Adolescente
    Crimen
  • Inicio
InicioMundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo

Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capoES

Romántica
Eilana Osorio Páez  Recién actualizado
goodnovel18goodnovel
0.0
Reseñas insuficientes
50Capítulos
5.0Kleídos
Leer
Añadido
compartir: 
  • Copiar
Denunciar
Resumen
Índice

Sinopsis

MatrimoniobxgInteligenteRomanceMafiaDominantePosesivo

En ocasiones la ilusión de encontrar un amor de telenovela no era el destino para todo el mundo. A mí me llegó un hombre sin principios, sin valores, sin un mandamiento invicto. ¿Por qué? Y la respuesta era por el propósito que tenemos en la vida. Conocerlo fue un remolino tan turbulento que no vi un pronóstico certero, pero con el amor nada estaba escrito, por amor somos capaces de hacer cualquier locura. Hasta tener una metamorfosis… Roland Sandoval, un magnate que tiene dos vidas diferentes. Una fachada intachable y un mundo oscuros donde era el demonio mayor de un emporio de muerte. Verónica Vásquez una sencilla estudiante que aparece en su vida para enredarle la existencia, o quien sabe, para cambiarle la vida. ¿Podrá un demonio dejar su mundo por amor? ¿Podrá dejar el infierno donde era el dueño absoluto para vivir con su ángel? ¿Roland Sandoval logrará dejar su oscuridad para construirle un mundo diferente a la mujer que ama?

Leer más
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo Novelas Online Descarga gratuita de PDF

Último capítulo

  • Capítulo 50 - Te regalo un apartamento

    Continuó hablando con su amiga y ese favor que le pedían.—Lorena, tú sabes moverte muy bien, sin embargo, no sé cómo bailan tus amigas. —Se bajó al verme que salí del auto—. No tengo problemas en ayudarles con la coreografía, acompaño a Roland hacer algo y le pido que me lleve, por ahora miren qué canciones quieren bailar.Habló algo muy bajo, no escuché muy bien, se sonrojó, me dio la impresión de que le comentaba algo referente a lo de esta mañana.» Hablamos más tarde. En un par de hora nos vemos.—¿Qué pasa?Me miró y se encogió de hombros, observó a su alrededor, sus ojos poco a poco se fueron abriendo.—Wow. —sonreí, al menos le parece lindo—. Es increíble. —Era bello verla con esa sonrisa—. ¿Tú lo hiciste?—Mi firma —contesté.—No, Roland, el lugar tiene tu firma.—¡Ah! ¿Tengo firma? —Me tomó de la mano, estaba frío, no quería hacerla enojar.—¿Qué hacemos aquí?—La dueña de unos de los apartamentos vendrá hoy a mirar si le gustó lo que hicimos, y Marlon comentó que lo había d

  • Capítulo 49 - Yo no soy digno de ti

    Esperaba su respuesta, se veía bastante incómodo. Bajó la mirada. —No Patrón. Todo sobre ruedas. Es… Miró a Rata, este se cruzó de brazos alzando una de sus cejas, gesto de autoridad o le dices o te jodo, la expresión de mi amigo era de inconformidad o tal vez un poco de vergüenza. —Por un tema… Salgo con Raúl, el mejor amigo de la señorita —bajó la mirada y estaba rojo—. Comprendo si no soy apto para mantenerme a su lado. No sé qué cara puse, supongo de «¿qué m****a es esto?», me atarugué con el agua. Cebolla afirmó y dio media vuelta. —¿A dónde m****a vas? —No me miró, algo le incomodaba—. El hecho de que el palo lo metas de reversa no te ha afectado para bajar a quién se te ha encomendado y mucho menos se te ha arrugado el valor al protegerme. Me sorprendiste, hemos disfrutado en muchas fiestas y te gustaban las mujeres. —Y me gustan, patrón. Pero… es algo distinto. —escuché la carcajada de Rata—. Gracias, supongo que el cambio de mentalidad se debe a la señorita. —No me met

  • Capítulo 48 - Fue un delirio su boca

    Se sentó en la cama, alzó una de sus cejas y desvió la mirada sonriendo un poco. Me acerqué al nochero, tomé el reloj. Lo hice con la intención de quedar a pocos centímetros de ella e instantáneamente mi verga se levantó aún más. No me moví, ella a duras penas respiraba. Al ver que no movió un solo dedo, respiré profundo, resignado una vez más a irme en blanco, no pasaría nada.Abroché el reloj. Sin embargo, en ese instante surgió lo que yo llamaría un milagro. Verónica besó mi verga y está en el alto grado de necesidad, reaccionó poniéndose más dura. Mi respiración comenzó a alterarse. ¡Qué mierda era esto! ¿Acaso no era normal que me hicieran sexo oral?La miré, sentada frente a mí, como siempre he soñado, dudó o tal vez se enfrentaba a ella misma en sí, seguía o no. Quería tomarla del cabello y pegarla para que succionara, deseaba que se tragara lo que tenía reprimido por su culpa.No me moví, dejé que ella lo hiciera, su rostro se tornó rojo por lo realizado. No obstante, la noche

  • Capítulo 47 -Frustrado

    Dejé a Verónica en su apartamento y nos dirigimos a la casa, de mi parte, completamente frustrado. Cebolla nos había recogido en el aeropuerto. Rata me miraba de reojo, no demora en preguntarme, a estos dos hombres que considero mis amigos no era mucho lo que nos hemos ocultado.Si me pregunta, ¿qué le diré? Ahora quedé peor, más engarrotado y con un puto dolor en mis bolas que ya no soporto. La puta abstinencia me volverá loco, era imposible todo el tiempo transcurrido y nada de nada. Cebolla conducía a gran velocidad por la avenida, Rata seguía mirando, quiere saber lo que pasó a noche con Verónica.—El clima se ve agradable. —Lo miré, ¿desde cuándo le importa el clima?, fui ignorado y siguió hablando—. Sí, está agradable para descansar. ¿No te parece Cebolla?—¿Cuál es el puto interés en el clima?Disparé de una, me encontraba irritado, me llevaría al mundo por delante. Pasé calmado por Verónica, pensé que al tenerla lejos lograría calmarme, pero no. No me gustó separarme de ella,

  • Capítulo 46 - ¿Qué nos impide estar juntos?

    Sus ojos eran un lamento, y me arrepentí tanto por mi actitud.—Me asusté —susurré—. Pensé que ibas a ser más sutil. —hablé en un susurro.—¡Verónica! —gritó—. Tengo casi dos meses sin tener sexo y cuando voy a hacerlo con la mujer con la que he soñado desde el primer día, ¡¿cómo quieres que este?! Te deseo de una manera enfermiza. Quiero abrirte de piernas y lubricar con mi lengua tu vagina hasta escuchar tus palabras implorando que te penetre, y deseo hacerlo hasta el fondo las veces necesarias para descargar mi leche en ti.Se levantó, mi corazón bombeó más fuerte, habló tan específico, fue pareció obsceno y al mismo tiempo excitante, mi vientre vibró al escucharlo. No me había movido de lugar, él comenzó a caminar por la sala.» &ique

  • Capítulo 45 - Soy un demonio

    Arrugué la frente. ¿No era la primera vez? Eso lo dijo con otra intención, su mirada fue pícara.—Lo de tu hacienda la vez aquella… ¿Fue intencional?—Eso no lo sabrás. Y no te dejo encerrada, Vida. Bloqueé la entrada del personal, tú puedes salir e ingresar cuando quieras. —Me tomó de la mano—. Ven, te mostraré el resto de la finca, ¿quieres comer algo?—No tengo hambre.El corazón lo tenía en la mano, Roland me miró de reojo, sentí el corazón a galope. ¿Por qué estaba tan nerviosa? Lo que iba a pasar era lo deseado desde que lo conozco, ahora no te pongas tonta, Verónica. Recorrimos el lugar y en cada estación nos besábamos y las caricias se ponían más calientes, los roses sutiles de su mano en mis senos, me gustaba eso, en cada rinc&oacut

  • Capítulo 44 - De nuevo encerrada

    Me desperté al escuchar voces en la sala del apartamento. Roland nos había dejado a eso de la media noche y quedamos en almorzar juntos, la idea era recuperar los días separados. La puerta de la habitación se abrió y ahí entraba él. Ese hombre era perfecto, se veía tan bello, tan sensual, debía decir la verdad, se veía muy varonil, demasiado sexy, muy comestible. Lo mejor de todo era mío, lo tenía para mí. Tal vez peco por presumir, pero sé que él estaba conmigo.—Buenos días. —sonrió con esa típica malicia, Dios ese hombre humedecía mi entrepierna—. Deja de verme de ese modo, «señorita Verónica» —trató de contener la risa.—No todos los días un atractivo hombre me despierta.—Falta poco para que sea obligatorio. —sonreí al comprender que se re

  • Capítulo 43 - ¿Perdonas a este demonio?

    Me puse muy nerviosa al escuchar su voz, mis amigos dejaron de abrazarme al ver a Roland apoyado sobre la puerta de mi auto.—Creo que tendré tiempo para hacer algo diferente, ¿me ayudas, Raúl?—Chicos. —Mi novio los llamó—. Rata quiere hablar con ustedes.Se miraron y salieron al andén, atravesaron la calle y llegaron hasta donde él esperaba en el carro. Las manos comenzaron a sudarme cuando se acercó.» Lamento haberte dicho lo que te dije. —Se cruzó de brazos, esperó a que tomara la iniciativa, pero no dije nada ni me moví de lugar, él suspiró—. Perdóname, no me hagas repetirlo, por favor.No encontré las palabras. Quería decirle tantas cosas, hasta cachetearlo por lo grosero y no pude, me quedé inmóvil.» Verónica, por favor. —susurró—. Yo odio la Navidad porque… —peleaba consigo mismo, iba a decírmelo, no digas nada, déjalo hablar—. Cuando niño me gustaba mucho, mi madre y mi… Todos los primeros de diciembre arreglábamos la casa. El conflicto es que ella me dejó con… —Le costaba

También te gustarán

  • Cuando Sus Ojos Abrieron
    Cuando Sus Ojos AbrieronSimple Silence7.3M leídos
  • Esposa Pecadora
    Esposa Pecadora Sixteenth Child3.9M leídos
  • Déjeme ir, Sr. Hill
    Déjeme ir, Sr. HillSuperficie del Sur3.6M leídos
  • La Heredera Divorciada Billonaria
    La Heredera Divorciada BillonariaQuiero comer carne3.3M leídos
  • La Pequeña Novia del Sr. Mu
    La Pequeña Novia del Sr. MuGato con sabor a limón2.5M leídos
  • ¡Buenas noches, Señor Ares!
    ¡Buenas noches, Señor Ares!Lenguaje de paz2.3M leídos

Libros interesantes del mismo período

  • Más Padre que CEO
  • Axel Cox
  • ¿Del Amor al Odio o del Odio al Amor?
  • UNA NOCHE DE PASIÓN CON EL CEO
  • Cliente Prohíbo
  • Zeink, el heredero del Árabe
  • UN CONTRATO PARA STELLA.
  • Más allá del Alfa
Comentarios Deje su reseña en la aplicación
No hay comentarios
50 chapters
Capítulo 1 - Un adiós inesperado
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
—¡Lorena llévame!Le insistí por enésima vez. No tenía nada que hacer, andaba aburrida en la casa. La universidad suspendió clases como por variar y ni de fundas me iba para la finca, visitar a papá con su habitual mal genio. Desde la muerte de mamá todo cambió y no quería incrementar su nostalgia al verme, según me parezco mucho a ella… Y la verdad no quería por el momento ser la causante de un dolor para él.—No es una fiesta para ti Vero, ya sabes cuál es el mundo en donde me muevo.Dejó de maquillarse, se giró quedando de frente, podía verla a través del espejo del tocador. Solo tenía su ropa interior puesta de encajes como le gustaban a los clientes «según ella».—¿Todas tus fiestas terminan mal? —Me senté en su cama.Mi compañera de apartamento era una linda modelo que estaba siendo reconocida en el mundo de prepagos. Estudiaba Bellas Artes, aunque quién sabe cuándo la termine. Tenía un cuerpo formado por el cirujano, con un corazón muy noble, pero con mala extraña cabeza y algo
Leer más
Capítulo 2 - ¿Fiesta sana?
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
La verdad me dolía mucho la muerte de mi perro, como para ponerle a pensar en el tal don ese.—Está un poco apenada, pero no quiere verte morir de hambre. —Nos sentamos en la cama y comenzamos a comer, a pesar del desánimo ingerí los alimentos—. Vero no te enojes, sabes que no lo soportará. Ella estaba feliz por estar con el duro de los duros.—A mí qué carajos me interesa con quien ha estado.—Sabes que te quiere mucho, jamás ha permitido enrolarte con esos patanes con quien sale. No te ha llevado a sus fiestas de narcos. Eso es lo más importante, la forma en cómo te demuestra cuan valiosa eres para ella.—Es un mundo muy sucio Raúl, la verdad ya no sé qué hacer para alejarla de esa vida. He aprendido cinco idiomas porque ella cada dos por tres se decepciona con amores, entonces decide cambiar y hacer algo diferente, yo le patrocino, pero su problema, ¡nunca termina!La expresión de su cara me dio a entender que comprendía. A él lo ha metido en un centenar de viajes para luego dejarl
Leer más
Capítulo 3 - Una fiesta diferente
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
Vi el nerviosismo en ella.—Hay muchos carros con hombres, iba a ser una audiencia solo con mujeres —susurró.Salimos del auto, guardé las llaves en el bolsillo trasero del pantalón. Un señor delgado, alto, rudo, algo atractivo, con jean, botas y camisa manga corta de cuadros dejaban ver su buen estado físico aparte de sus tatuajes, tenía el cabello negro en un corte militar, sus ojos eran negros. Estaba armado, llegó a nuestro lado. Nos preguntó nuestros nombres, bueno peguntó el mío, a Lorena ni la miró, supongo que la conoce.—Me llamo Verónica Vásquez. —metí las manos en los bolsillos del delgado busito blanco.—¿Vásquez qué? —levantó una de sus cejas, luego miró a Lorena.—Verónica Vásquez Benítez, ¿algo más?Comprobó una lista, al no verme registrada apuntó mi nombre con su bolígrafo metálico, un poco más grueso de lo normal. El silencio fue incómodo o ¿así serán estos protocolos? Al ver el rostro de Lorena lo supe, esto no era normal. Un par de ojos negros me escanearon de pies
Leer más
Capítulo 4 - Encerrada en su fortaleza
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
Expulsé todo lo que tenía en el estómago. ¡Qué asco! Fue un choque mental el comprobar la degradación humana a qué punto había llegado, bajo mi punto de vista ante la vida. No logro entenderlo. Bajo mi concepto estructural de crianza no concibo vender mi cuerpo por dinero, por unos trajes de marca o por pasear en carros lujosos. Yo valgo más que eso. Mi forma de ver la vida era tan ajena a lo que se vivía en la planta baja.No era por ser religiosa, pero de algo sí estoy segura. Eso no le gusta al Creador. Se trata del respeto a tu intimidad y a la misma vida; puedes contagiarte de alguna enfermedad. En una orgía quebrantas tantos valores. Si el ser humano comprendiera que independiente a la religión profesada se debe cuidar la integridad como persona. Los mandamientos son bases fundamentales para mantener tu consciencia tranquila, era solo eso, respetar leyes universales así no creas en un ser Superior. Ahora entiendo las palabras de mamá. El meollo de la crisis del mundo estaba en l
Leer más
Capítulo 5 - ¿Casualidad?
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
El sol ingresó por la ventana, la luz pegó en mi rostro. Abrí los ojos, por un segundo quedé desorientada. ¿En dónde me encuentro?, mi mente comenzó a enviarme avisos, imágenes, recuerdos y comprendí que no pude salir de la finca de Roland Sandoval.Me estiré, al darme la vuelta él dormía al lado mío. ¡En la cama!, grité como loca, salí despavorida de las cobijas, al mismo tiempo él salía desnudo con una pistola en la mano apuntándome.Quedé paralizada observando un lugar prohibido, era imposible no hacerlo. Su cuerpo era perfecto, desde su cabeza afeitada hasta la punta del pie. Recordé lo dicho por Lorena, él era muy bien dotado de su miembro… Y la humanidad era morbosa. Sentí calor por todo el cuerpo y más en el rostro, ¡qué vergüenza!—¡Por una mierda! —gritó—. ¡Jamás en tu puta vida grites de esa forma al lado de un hombre como yo!Habló bastante enojado, me di la vuelta para darle privacidad. Escuché su risa.—¿Qué hace aquí? —pregunté.—¡Es mi casa!A los segundos llegó hasta l
Leer más
Capítulo 6 - Su otro mundo
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
Estaba pensativo, le hice caras para que aceptara mi propuesta, no era la primera vez que se hacía pasar por mi novio. —¿A qué hora? —Le sonreí. —¿Eso es un sí? —Por poco me pongo a brincar como niñita. —Pero en esas condiciones. Quiero ser el primero en entregar la tesis. —Me señaló con un dedo. —Vale. —aplaudí. —Lorena quiere salir el sábado. —crucé mis brazos. —A ella no le dices que no, en cambio, ¿conmigo lo piensas? —negó. —Ni lo uno ni lo otro, Vero. Desvié la mirada, comencé a zapatear un poco con mi mano en la cintura. Soltó una carcajada, desordenó la coleta de caballo. » Sabes que eres la primera. No te tocó rogarme, si le preguntas a Lorena hasta me lloró, porque llega con un amigo y no quiere dejarte sola en la casa, seré de tu pareja. —Ya en nosotros es costumbre. Soltamos la carcajada, el profesor dio dos palmadas, señal de comenzar a bailar. Raúl me llevó en su moto hasta el apartamento, no demoró mucho en la casa. —¿Paso a recogerte? —Lo pensé. —No, como
Leer más
Capítulo 7 - Comportamiento extraño
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
Tenía curiosidad, quería saber si estaba comprometido. Por eso le pregunté mientras ella supervisaba los pasabocas. —Ojalá. Roland es un caballero, correcto, trabajador, honrado. En fin, un partidazo mija, bastante discreto con relación a su vida amorosa, sé que Beatriz llama su atención, pero aún no se ha cuajado nada. Eso de caballero y todo lo dicho no puede ser cierto, o ¿tendrá dos vidas…? Era mejor no meterse con él. » Cuéntame ¿cómo está tu mamá? —Se me arrugó el corazón, mi silencio llamó su atención. —Mi madre murió hace más de tres años, cáncer de mama y nos enteramos cuando ya era demasiado tarde. —¡No puede ser! Dejó a un lado los pasabocas para abrazarme fuerte, se humedecieron mis ojos, en ese instante ingresaron a la cocina. Limpié mis lágrimas e intenté sonreír. —Tu novio parece algo aburrido. —comentó Roland. —Sí, debe sentirse incómodo, señora Gisela debo regresar. Apretó la mano y salí, esa forma de mirarme como si amenazara con matarme si hablo. Choqué con
Leer más
Capítulo 8 - Enseñando modales
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
Raúl nos extendió las manos y cada una tomó un costado de su fibroso cuerpo, no sé por qué volvió a mencionarlo, gracias a Dios nadie lee los pensamientos, porque no he dejado de pensar en él, no porque me guste… ¿O sí? Algo en él me clama, pide atención. De salida tomé las llaves, abrí la puerta y la brisa fría me pegó de golpe en el rostro. Nos esperaba una noche joven y divertida. —¡En menos de cinco minutos llega el taxi! —gritó Lorena, traía las chaquetas de ambas—. Póntela, Vero. —El taxi llegó en menos tiempo, Raúl al ingresar al auto lo hizo con sus cejas arrugadas. —¿Pasa algo? —negó. En el trayecto de nuestro apartamento a la zona rosa nos tardamos la hora completa, nos mantuvimos en un silencio absoluto. Y yo he tenido que pelear de manera constante con la imagen de ese hombre, no debería pensar tanto él. No comprendo su comportamiento, la actitud de ayer fue amenazante, porque tenía miedo de que hable, ¿será por su papel en la mafia? No quería ser conocido como el capo
Leer más
Capítulo 9 - Cuidado… hombre peligroso
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
Lorena seguía hablando mientras yo miraba en la dirección del hombre que bailaba como los dioses. Pero alcancé a escuchar su último comentario.—No sabía que bailara tan bien… —interrumpí a Lorena.—¿Tan bien? ¡Lorena, es perfecto en una pista de baile! —Mi expresión sonó demasiado efusiva.—¡Ay amiga! He estado una sola vez en su cama, fue un día y ha sido el mejor de mi vida, fue una gran experiencia, te lleva al límite de tu resistencia. Su problema es que Jamás repite mujer.Me acaricié los brazos al saber, si caigo ante su encanto viril, seré una más en su infinito registro de mujeres» Algo pasa contigo. —Nos miramos—. Mi Vero no sé si lo que te diré te sirva, sin embargo, confiaré en tu sensatez.—Dime. —quería saber todo lo concerniente a su vida.—Ninguna mujer había estado con él en su recinto privado. Jamás, jamás ha bailado en las reuniones de su entorno, dicen que nunca va a discotecas porque lo pueden matar y esta noche hay más de cincuenta hombres pertenecientes a su se
Leer más
Capítulo 10 - ¿Dijiste amigos?
Mundos Diferentes - Cuidado con los hijos del capo/Eilana Osorio Páez
Abrí la boca, Rata se ubicó a tres metros de su Patrón. Vi el desplazamiento de varios hombres bajo la obediencia de la «Rata». Solté una enorme carcajada en su cara, sin decirle una sola palabra, di la vuelta para tomar el taxi que pasaba.Gracias a los ángeles por sacarme de esta. Escuché mi nombre en repetidas ocasiones y en un tono bastante alto. No me importó, debe aprender que no todo era dinero, había un código de decencia el cual se saltó conmigo en todo su esplendor. Su madre no le enseñó modales, no le enseñó que no todo lo puede comprar, por lo menos a mí no me comprará con dinero… Valgo mucho más que eso, a mí me ganan con un corazón en su mano.El lunes después de la clase de mandarín, una camioneta negra se detuvo en la entrada, de la cual se bajó la Rata. ¿No se piensa rendir, el capo? Sin embargo, una sensación de hormigueo emergente llevándose todo a su paso, cientos de mariposas galoparon por mi estómago con el simple indicio de que Roland quería verme. «Eso es estar
Leer más
Leer más
  • Quiénes somos

    Sobre nosotrosTérminos de usoPolíticas de privacidad
  • Contacto

    ColaboraciónPalabras clave
  • Redes Sociales

    FacebookFacebook grupoinstagram