Capítulo 0251
Por otro lado, Celia estaba en el orfanato para niños discapacitados, recibiendo una transmisión en vivo.

Tras grabar un conjunto de tomas, ahora era tiempo de descanso.

—Señorita Fernández, ha trabajado mucho. Gracias por su contribución a los niños —dijo el director del orfanato, sonriendo mientras se acercaba.

—Hace calor, tome un poco de agua —añadió, entregándole rápidamente una botella de agua mineral.

Su orfanato fue seleccionado por una Fundación de Caridad, un tipo de crowdfunding donde las ventas de obras de arte de niños discapacitados se donan a ellos. Por esto, el director está lleno de gratitud. Con casi sesenta años, ama este trabajo y ver que los niños tengan un buen futuro es su mayor deseo.

—¿Agua mineral de marca desconocida? Yo solo bebo importada —Celia miró con desdén la botella que le ofreció el director.

No pudo evitar fruncir el ceño; el director tenía un olor a moho, como si la ropa no se hubiera secado, y el aroma era asqueroso. Además, los niños estaban suci
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP