Dante llevó un sorbo más de whisky a su boca que quemó su garganta por completo, su cabeza estaba hecha un ocho, aún no entendía cómo fue que Antonio lo había traicionado, siempre le había demostrado envidia y más cuando Dante subió al poder, solo que nunca llevó a pensar que su ambición llegara tan lejos.
—¿Qué piensas hacer? —preguntó Alonzo llevando la copa de whisky a su boca.
Dante hizo una mueca de desagrado, llevó una de sus manos a su cien y sobo lentamente, evidentemente su molestia se había incrementado más al saber que el clan le había brindado su apoyo Antonio.
—Solo quiero que empiece la función, vamos a darle la bienvenida a mi querido primo como jefe del clan —dijo Dante, alzó una de sus manos e hizo un ademán y así brindar.
—Está bien, ordenare que ataquen una de los clubes —habló Alonzo, tomó su celular, se colocó de pie y caminó hacia la ventana, y así se las órdenes.
—Quiero que vayas tú mismo —dijo Dante, Alonzo se giró y asintió.
Alonzo tomó su arma y la llevó a l