Ella baja la mirada, no se atreve a decirme algo, solo espera que me calme mientras me observa con tristeza. No nos hablamos, tenemos muchos sentimientos entre nosotros que no podemos lidiar con tanto.
— Tienes razón, amor. Fui imprudente, no lo volveré a hacer.— No me llames así. — pido herido.— ¿Qué?— Tú no puedes decirme amor y dañarme como si me odiaras.— Maxi…— ¿Por qué no comprendes que tú y la bebé lo son todo para mí y que si descuidas tu salud me estás matando? — pregunto con enojo.Axael llora y yo quiero golpearme porque estoy causando su sufrimiento, pero, no la consuelo, no puedo evitar todo sufrimiento cuando ella debe entender que lo que hizo no estuvo bien.— Me regañaste por no pensar en la salud de la bebé y solo irme por el camino corto acabando con su vida