Secó una de mis lágrimas con su dedo pulgar y las palabras del juez se hicieron escuchar—. Una vez dicho los votos, vamos a la esperada pregunta: Emerson Harker, ¿aceptas a Berenice Swan para ser tu esposa?
—Acepto —respondió orgulloso.
—Berenice Swan, ¿aceptas a Emerson Harker para ser tu esposo?
—Acepto —respondí hipnotizada en su mirada verde.
Dante se acercó a nosotros trayendo con él las alianzas, y luego que fueran bendecidas nos las colocamos con manos temblorosas.
—Con el poder que me confiere las leyes y siendo participe del infinito amor entre ustedes, los declaro marido y mujer. Emerson, puedes besar a la novia.
Sin esperar un segundo más, mi marido tomó mi rostro entre sus manos y me besó tan delicadamente que me haría llorar. Este era nuestro primer beso como marido y mujer, sellando el titulo delante de todas las personas que más queríamos.
—Te amo, mi hermosa esposa —dijo entre beso y beso.
—Yo te amo a ti —respondí besándolo una vez más.
Llevó sus manos a mi a