Capítulo 54.
—Mi hija ya ha estado lejos de nosotros durante demasiado tiempo. Cualquiera puede ir a la guerra mientras su madre y yo la guiamos y protegemos en nuestro territorio. Podrás haber vivido cientos de vidas, pero nunca has sido un Alfa Supremo.
El silencio después de eso fue ensordecedor.
—No — Aceptó finalmente — Yo solo he sido el lobo que ha tenido que aprender a utilizar un poder que estaba más allá de su imaginación para proteger a nuestra raza de los Alfas Supremos que no usaban lo que Gran Madre les concedió para el bien.
Papá se cruzó de brazos y estrechó sus ojos.
—Me necesita.
—Así como toda la raza... ahora que ya no puedo ayudarlos. —papá se tensó —Tú y yo sabemos cuál es el verdadero peso de ser un Alfa Supremo, y por eso mismo es que me estoy ofreciendo a guiarla. Alina... no puede controlar muy bien su fuerza, sería peligroso estar en un lugar lleno de civiles, sobre todo estar cerca de cachorros, casas frágiles... creo que sabes a lo que me refiero.
Papá gruñó y