Capítulo 24.

Desperté con un peso extraño sobre mi brazo y otro sobre mis piernas. Tardé unos segundos en darme cuenta de que no era un ataque en medio de la noche, sino la invasión más normal del mundo: todos mis primos y hermanos se habían metido en mi cama.

Al parecer ya habían superado la etapa en la que esperaban a que despertara para tener una reunión.

Donovan roncaba con la boca abierta justo a mi lado. Teodore había reclamado la parte de mis pies y me los apretaba con su peso, como si fuera un perro guardián. Kyle, cómo no, estaba medio oculto bajo la manta, con los ojos abiertos como un búho, como si estuviera recopilando información incluso en sueños. Silvie… ella sí dormía tranquila, abrazada a la almohada y con una sonrisa soñadora que me hizo rodar los ojos. Seguramente estaba pensando en cierto cachorro de la manada Fénix.

Zayn, mi gemelo, estaba hecho un ovillo en la orilla, ocupando menos espacio del que en realidad tenía, como si con eso pudiera pasar desapercibido. Y Theo,
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP