La luz del sol caía débilmente sobre la ciudad, reflejándose en las ventanas de las oficinas de la Fundación Taylor. Sophie se encontraba en su despacho, una taza de café olvidada sobre su escritorio mientras sus ojos recorrían el informe que acababa de recibir. Su corazón latía con fuerza en su pecho, pero no era por el peso del trabajo. Era por la noticia que había llegado esa mañana, una noticia que empezaba a cambiarlo todo.
El teléfono de Sophie vibró, cortando el silencio que la rodeaba. Era un mensaje de Logan.
"Estás bien, ¿verdad?"
Sonrió suavemente, su dedo acariciando la pantalla. Sabía que su preocupación era sincera. Después de todo lo que había pasado, después de todo lo que había perdido, Logan siempre estaba ahí, pendiente de ella, aún en los momentos más oscuros.
"Sí, solo un poco de trabajo. Te contaré después. Te amo."
No pasaron ni diez minutos antes de que su teléfono sonara, y esta vez era una llamada. La voz de Logan al otro lado de la línea era profunda, pero t