Mundo ficciónIniciar sesiónDesperté con el cuerpo de Mila encajado en el mío, su respiración cálida rozando mi piel marcada.
Abrí los ojos lentamente, sin querer romper ese instante.
La luz del amanecer se filtraba por la ventana, dorando su cabello.
Giré un poco la cabeza y la vi.
Mi marca brillaba en su cuello, fresca, perfecta.
El símbolo de lo que la luna nos había devuelto.
Mi compañera. Mi destino. Mi milagro personal.
Una sonrisa me escapó sin permiso.
Kyros saltaba dentro de mí como un







