54: Hacer lo que se tiene que hacer.
— Esto es… —
— Eso es una orden para asesinarme a mi y a mi hijo. — interrumpió Emma. — No van a detenerse Daniel, y debemos estar preparados. — terminó de decir.
Daniel mantuvo la calma.
— Se de lo que son capaces. — dijo Daniel con seriedad. — Hay algo que no te he dicho. — dijo con algo de dolor notable en su voz.
— ¿Qué es lo que no me has dicho? — cuestionó Emma.
Daniel sintió que las palabras le salían con tanto dolor como si una daga le estuviese cortando la garganta. Aquel nudo que se le había formado le estaba haciendo daño.
— Estoy seguro de que Melina Cervantes es la culpable de la muerte de mi madre…creo que los Cervantes planearon la muerte de mi madre. Por eso fue que envié a mi sobrina lejos. — respondió.
Emma se sintió genuinamente asombrada y horrorizada ante tal declaración. Se había quedado en silencio.
En el castillo de Bukingham, Melina y Mónica compartían el té.
— Eduardo ya está al tanto de la situación, si el no logra detener a Emma Borbón entonces nos tocará a