La matriarca Miller se mantenía inmutable frente a Franchesca, los rasgos duros de la mujer le generaban cierta incomodidad a la joven, pero trato de mantenerse en todo momento erguida y entera.
—¿Qué has logrado en este mes trabajando codo a codo con mis nietos? —De su cartera de diseñador saca un gran fajo de billetes el cual arroja despectivamente en la mesa. —En ese mazo que ves sobre la mesa hay 20 mil dólares, solo encontrarás billetes de 100. Es un regalo, un incentivo de mi parte para que te vuelvas más participativa en esto.
—Muchas gracias señora Miller, por su generosidad. —La mujer rápidamente toma el mazo de billetes y lo guarda en su bolso esbozando una sonrisa nerviosa. —En este mes he logrado acercarme bastante a Alexis, claro, me he acercado a él de un modo amistoso... Él ya me considera su amiga y me cuenta sus problemas. No necesariamente tengo que acercarme a él en plan amoroso, siendo su amiga puedo romper desde dentro su relación con Linda.
—Eres inteligente y es