Juego de traiciones

Mis párpados estaban hinchados, pero mi mente estaba por fin clara. Altea me había ofrecido la venganza como bálsamo para mi dolor, un pacto que me ataba al destino del Rey Alfa durmiente. El cristal roto seguía en el suelo, un recordatorio del límite que estuve a punto de cruzar. El camino de la cobardía estaba cerrado. Solo quedaba la lucha. La voz de Dorian resonó en mi memoria: tienes una misión.

Me levanté del suelo, mis piernas firmes. No volvería a arrodillarme ante nadie.

Mientras yo me recomponía, la semilla de la discordia plantada por Altea germinaba en los salones de mármol del castillo.

Tessa se quedó congelada en el umbral de los aposentos de su hijo, la mano crispada sobre la jeringa que ocultaba en el bolsillo. La voz de Altea, fría y autoritaria, resonó en el amplio pasillo con paredes forradas en terciopelo carmesí. Las estatuas de lobos ancestrales parecían observarlas, testigos mudos de la disputa.

—¿Adónde más, suegra? Vengo a ver a mi hijo —contestó Tessa, endere
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP