Capítulo 88: Shock emocional.
La voz de Frederick llegó a mí como un llamado de esperanza. Mis ojos fueron directo al hombre de ojos azules y mentón fuerte. Detrás de él, habían varios hombres vestidos de trajes y con lentes oscuros.
El corazón me latía con prisa al ver a mi exesposo con el cabello revuelto y su pecho subiendo y bajando rápidamente, una mirada animal adornaba su rostro, pero trató de ocultarlo al tensar su mandíbula. No me estaba viendo a mí, sus ojos estaban fijos en Travis y la piedra que llevaba en la mano.
Olvidé la posición en la que estaba y traté de reincorporarme para ir en busca de mi exesposo, pero Travis colocó su mano libre en mi hombro, volviendo a impactarme contra el suelo.
—¡Quieta perra! —Alzó la piedra hasta llevar su brazo a la parte de atrás de su cabeza. Se mantuvo así, en modo amenazador.
El corazón me latía a máxima velocidad.
Frederick estaba tan cerca, vino por mi, a rescatarme. Pero... esto no pintaba nada bien. Un movimiento en falso y terminaría con mínimo, una nar