80. Me conservo bien
80
Ryder
Las paredes frías del cuarto de interrogatorio eran casi reconfortantes. He estado en lugares peores. Oscuros. Reales. Este sitio parecía una parodia de autoridad. Los humanos siempre queriendo tener el control… incluso cuando ni siquiera comprenden a qué se enfrentan.
Héctor entró con paso firme, el gesto endurecido y una carpeta bajo el brazo. No había necesidad de fingir cortesías. Sabíamos exactamente quiénes éramos.
Tiró la carpeta sobre la mesa con fuerza.
—Ryder Thorne. Más de cuatrocientos años. Reportado muerto en 1873… reapareces en 1940… luego en el 68… y después cada dos décadas. Una sombra entre sombras. Pero lo que no entiendo —dijo con tono gélido mientras se inclinaba sobre la mesa— es qué mierda haces con ella.
—Me conservo bien —bromeé y arrugo el entrecejo. Ya veo, un amargado frustrado.
No parpadeé, me le quedé mirando fijamente.
—Seraphina. ¿Cuál es tu relación con ella? ¿Por qué tus hijos son hibridos? ¿Seraphina Kingswell es la madre? ¿Cómo lo lograste?