Bianca condujo hasta la orilla de un lago apartado y detuvo el carro. Bajó y se dejó caer sobre el césped.
...
Francisco terminó el borrador del diseño y se estiró, moviendo los hombros. La inspiración para la nueva línea de ropa femenina había fluido de maravilla. Miró la hora: casi mediodía. Pensó en el cumpleaños de Bianca y sonrió para sus adentros. Seguramente mañana vendría a trabajar con él.
El celular sonó. Francisco lo tomó y vio que era su madre.
—Bueno, mamá.
Tras colgar, tomó una chaqueta y salió a toda prisa. Linda se acercó para preguntar qué pasaba, pero él solo alcanzó a decir que había surgido un problema familiar y que le encargaba el estudio.
Condujo a toda velocidad hacia el aeropuerto. No podía creer que su padre hubiera caído enfermo. Siempre había gozado de una salud de hierro e incluso jugaba al golf con regularidad. ¿Cómo podía haber enfermado así, de repente?
En el aeropuerto, compró un boleto en el siguiente vuelo a Nueva York. Mientras esperaba en la sala d