—Eso es lo mejor. No toques lo que no es tuyo—. Sofía finalmente reveló su verdadero yo, ya no pretendía ser amable. —¡O te haré sufrir!
¿Sufrir?
¿De verdad creía Sofía que Katherine temía a la muerte? A Katherine le hizo gracia y se rió fríamente.
Sofía no podía ni imaginar las situaciones desesperadas que había vivido Katherine. La muerte era el menor de sus temores.
La dignidad y el cuerpo de Katherine habían sido violados por Anthony innumerables veces, sobreviviendo a duras penas hasta el día de hoy.
Si no fuera porque Oscar le dio nuevas esperanzas y la apoyó en cada paso que daba, hace tiempo que podría haber elegido un camino extremo.
—Sofía—. Katherine habló abiertamente: —No hace falta que me amenaces. Aún tenemos una larga lista de cuentas que saldar entre nosotras. ¿Crees que tus actos son intachables y que nadie conoce tus tretas? Si Anthony supiera que lo abandonaste durante el accidente y que la muerte de Richard está relacionada contigo, ¿crees que te trataría de la mi