66

La reina nos esperaba en la sala, con Ronda sentada a su lado y los bebés en su falda, en un gran sillón situado frente a los ventanales abiertos. Me recibió con una sonrisa afectuosa y me indicó que me sentara en el sillón junto al suyo. Por suerte, Mora no estaba a la vista.

La reina volvió la cara hacia mí como si me observara, y yo sabía que me estudiaba con sus otros sentidos. Permaneció un momento en silencio, muy quieta, y luego asintió lentamente con sonrisa triste.

—¿Estás bien, hija? —preguntó con suavidad.

—Sí, Majestad, gracias. Los masajes de Ronda me dejaron como crema batida, pero confío en que mis rodillas me sostienen bien.

Ellas rieron por lo bajo y la reina tendió su mano para cubrir las mías, cruzadas sobre mi falda.

—Me escuchaste —susurró con un guiño travieso.

<
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App