—Dana, tal vez deberíamos…
—Ah, no, no lo harás. Ella los trajo aquí para causar problemas. ¿Les dijo de quién es este territorio? —pregunté, mirando del matón uno al matón cuatro, y se miraron entre sí, confundidos.
—Dana, ¿de qué está hablando? —preguntó el matón dos y sonreí como un depredador mientras miraba a Dana.
—Sí, Dana, ¿de qué estoy hablando? Déjame pensar —toqué mi barbilla mientras veía las motos estacionarse.
—Ah, eso es. Este es territorio de los Príncipes de la Oscuridad y ¿piensas que soy una puta de club? Pues te equivocas. Así que dime, escuadrón de matones. ¿Les dijo por qué la echamos? —pregunté, mirándolos justo cuando la puerta se abrió y se voltearon para ver a mi papá, mi hermano y mi hombre de pie detrás de ellos. Momento perfecto.
—Bueno, miren a quién tenemos aquí, muchachos. —dijo mi papá Dylan mientras papá Daniel, Mav y Harry rodeaban a estos idiotas.
—Hola, cariño. —me dijo Mav y pasó su brazo sobre mi hombro y besó el costado de mi cabeza.
—Hola. —dije