Capítulo 329

—Vamos a tomar algo —dice poniendo los ojos en blanco, y le sonrío con afecto a mi jefe. Sé que su mujer lo pone de los nervios.

—Una mujer interesante —musita Nick mirando asustado su cuerpo cubierto de estampado de leopardo que se aleja bamboleándose. Creí que la conocía, pero al parecer no era así.

Me echo a reír.

—Le da muy mala vida a Paolo.

—Ya me lo imagino.

—Ahí está Mark —digo mirando detrás de él.

El grandullón se acerca a nosotros con las gafas de sol puestas y la misma expresión de pocos amigos de siempre. Mira fijamente las esposas hasta que nos saluda con una inclinación de la cabeza. Se la devuelvo.

—Tengo que hablar contigo, Nick. —Está muy serio, no me gusta, y la forma en la que parpadea Nick no me ayuda a sentirme mejor.

Busca en su bolsillo, saca la llave de las esposas y libera mi muñeca de la manilla.

—¿Qué haces? —pregunto retirando el brazo.

—Mark tiene que hablar conmigo —dice apretando los dientes.

—Ah, no —me río—. No vale que me sueltes cuand
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App