— ¡Álvaro! — Voceo Liam, siendo seguido por Alicia, apenas vieron a su amigo salir. — ¿Cómo está…? — Liam se detuvo repentinamente, pensativo y luego retomó. — ¿Cómo están los bebes? ¿Y Ania?
— No te voy a mentir, Liam… — Murmuró Álvaro con un gesto serio. — Están muy delicados, sobre todo los bebés…
— ¿Dónde están? ¿Puedo verla? ¿Puedo ver a los bebés con un eco? — Insistió Liam, ansioso.
— No, lo siento, ella está en un área restringida… Hemos hecho todo lo posible, pero no hemos obtenido buenos resultados y… Solo quería avisarte que… La estamos preparando para hacerle una cirugía… — Explicó Álvaro, omitiendo que Ania ya había sido intervenida.
— No puede ser… No puede ser… — Murmuró Liam, mesándose los cabellos, sintiendo un gran desespero. — ¿Necesitas mi aprobación? Haz todo lo necesario, la tienes, tienes mi aprobación, pero salva a mis bebés…
De inmediato, Álvaro notó que Liam parecía omitir a Ania intencionalmente y que estaba preocupado solo por los bebés.
— Ay, fui