La revelación de que su destino es darle un heredero a Wolf intensifica su desesperación. Christina no es solo una prisionera; es un peón en un juego de poder, un recipiente para un linaje que no desea. Este capítulo profundiza en su determinación de escapar, utilizando las habilidades que su abuela le inculcó y las que ha aprendido con Ulf. ¿Cómo afectarán estos recuerdos y la nueva información la lucha de Christina? La batalla por su libertad se vuelve más personal y urgente. Si les gustó este capítulo y desean seguir el viaje de Christina, les invito a colocar la novela en su biblioteca para no perderse los siguientes emocionantes giros.