—De eso quería hablarle. Cómo escuchó, soy una de las hijas de Ginco, y quiero acompañarlo. Cuando mataste a mi padre... —hizo una pausa para observar la expresión de asombro en el rostro de Crono—. Sí, sé que tú lo mataste, pero no te culpo. Todo fue parte de un complot también dirigido hacia mi padre por su amante Claudia y su hija Palas.
—¿Qué acabas de decir? ¿Palas es tu hermana? —Crono no podía creer lo que escuchaba; ahora estaba comprendiendo las palabras de Pirro.
—Palas es mi media hermana. Solo le podré contar lo que sé, porque lo escuché directamente de Claudia —dio un profundo suspiro antes de continuar—. Palas planeaba que tú acabarás con Agamenón y rechazaras a tu compañera. Luego, Pirro se haría cargo de Freya, ya que mi amiga era la obsesión de ese cruel lobo, mientras que Claudia se encargó de decirle a mi padre que tú torturabas y mantenías secuestrada a su hija Palas en esta manada. Por eso él actuó atacando a tu manada.
Crono ahora comprendía por qué Palas había de