—¿Dónde diablos, está mi hijo? — Gianluca grita mientras habla por teléfono. Han llegado a la casa de la montaña, pero el lugar está solo.
“Al parecer cambiaron de lugar, voy a investigar lo que sucedió”
En Scilla, Ettore sale de su habitación después de colgar la llamada a Gianluca, que se encuentra furioso en el lugar donde Isabella le dijo que llevarían al bebé y se dirige hacia el salón. Debe marcharse, porque no piensa estar en la villa cuando llegue Ruggieri, pero primero, debe conocer el verdadero lugar al que Rocco llevo a su hijo, ya que no estaba en Sicilia.
Ettore busca a su hermano; de alguna forma, debe sacarle la información. Él ha estado todo el día en casa y al niño se lo llevaron en la mañana, muy temprano.
—¿Sucede algo? Te ves diferente, estás un poco pálido. — Rocco levanta la mirada.
—¿Vienes a hablar de algo importante? Tengo asuntos urgentes que atender. — Su prepotente respuesta, enfurece a Etto