El niño Darkok hizo un gesto de disgusto, no estaba de acuerdo en que también a él lo restringieran de esa manera.
— Se supone que somos amigos, deberían de darme un trato diferente, a Lucano si metanlo en la lista negra, es un coqueto de lo peor, el tío Dominic dice que se parece mucho al tío Doménico en lo picaflor.
— Lo vamos a pensar pero no prometemos nada, cuando sea el momento adecuado, puede que negociemos, por ahora mejor vayamos por el helado.
Rafael Jr. Respondía a Vladimir, esos niños cuando crecieran iban a ser tiburones como sus padres.
— Vamos en mi coche, Rafael, tu serás mi copiloto, y los niños irán en la parte de atrás.
— ¿Y por qué no vamos en mi auto? Es más amplio que el tuyo. — El CEO obviamente no quería ser copiloto, estaba acostumbrado a tener siempre el control.
— Porque ya íbamos de salida en mi coche, no seas amargado y camina.
Los poderosos CEOS caminaban por la plaza con su traje hecho a medida, robaban las miradas de todas las féminas q