La declaración de De Russie, aunque había sido con la intención de defender a Angelic del ataque de esa insoportable mujer. No le hacía justicia.

Dimitrir había apretado los puños, no le faltaba demasiado para llegar a De Russie para darle una paliza por haber embarazado a su mujer cuando el todavía le hacía el amor. Cuando ella gemía su nombre entre las sábanas de su cama.

— Lo sabía, eres una mosca muerta, te embarazaste de este CEO estando aún casada con Dimitrir, ¿Eh? ¡Qué bueno que te pidió el divorcio, no eres más que una cualquiera!

— Yo... no soy una cualquiera... Agradezco que quieras ayudarme Aleksey, pero voy a decir la verdad.

— ¿Qué mentiras dirás para justificarte? La verdad salta a la luz, vas a tener un hijo con este hombre. Dimitrir no tiene nada que ver con ese bastardo.

— ¡Tú...! ¡No llames a mi hijo bastardo, estúpida mujer! La verdad es que ese día al salir de firmar los papeles del divorcio, yo... no pude más y me desmayé, fué Aleskey quien me en