31

POV de Clara

La casa se siente extraña.

Todos actúan como si esperaran que algo terrible ocurriera, pero nadie se atreve a decirlo con claridad.

Lyra va y viene del estudio del sótano, Juan ronda el jardín con la mirada encendida, como si pudiera ver el peligro a través de la niebla,

y Hugo…

Hugo casi no duerme.

Lo sé porque cada noche escucho sus pasos en el pasillo: lentos, pesados, como los de alguien que lucha por contener algo dentro de su propio cuerpo.

Hoy lo encontré en el sótano, frente al gran espejo usado para entrenar el control de energía.

El vidrio está rajado de extremo a extremo, pero él sigue allí, inmóvil, como si esperara que su reflejo saliera del otro lado.

—No has comido —dije, mi voz sonó diminuta.

No se volvió. —No tengo hambre.

—Entonces, ¿Rivens está activo otra vez?

Por fin me miró.

Su mirada era afilada, pero sus ojos estaban cansados.

Y, de alguna manera, siempre puedo distinguir cuándo habla Hugo… y cuándo empieza a filtrarse Rivens.

—No está activo —resp
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App