UN AÑO Y TRES MESES ANTES:

Polina mostraba una sonrisa de suficiencia mientras observaba el lugar como si perteneciera allí pero lo cierto es que era la primera vez que iba allí.

“Y la última.”

Pensó con desagrado.

Quería echarse a correr lo más rápido que pudiera pero no era una cobarde, ella nunca lo había sido.

“Relájate, cuando consigas tener sexo con este atractivo hombre lo olvidarás todo, Polly.”

La máscara ocultaba su identidad por eso el lugar era exclusivo.

Maksim un chico que iba con ella en la universidad la había invitado a ir, siempre estaba pindiéndole salir pero ella nunca había accedido, hasta ahora.

Después de todo lo necesitaba para algo.

Sexo.

Todo se reducía a eso en los hombres y ¿Qué había de malo que una mujer disfrutara de su sexualidad también?

Maksim la había sorprendido hablándole sobre el club y ya que nunca había estado en uno así accedió, tenía curiosidad, una que los hombres de su edad no solían cumplir, estaba probando al chico.

Lo cierto es que no le