ETHAN GARDNER
Olivia temblaba entre mis brazos. Lloraba sin consuelo, con esos sollozos agudos que desgarraban más que mil cuchillos. Su rostro estaba hinchado, la mejilla roja por la bofetada que ese maldito bastardo se atrevió a darle. Tenía las muñecas marcadas, enrojecidas por haber forcejeado con las cuerdas, por haber intentado protegerse… por haber luchado como la guerrera que siempre fue. Pero ahora estaba rota. Rota de miedo, de impotencia, de asco. Y yo… yo no podía hacer nada para borrar eso. Solo sostenerla. Solo abrazarla. Solo jurarle que nunca más.
—Estoy aquí… —murmuré, enterrando mi rostro en su cabello, apretándola contra mí dejando besos en su cabello mientras el auto se movía rápido a la clínica—. Lo logré, mi amor… llegué a tiempo… no te hizo nada más…
Mentira. Sí lo hizo. Sí la lastimó. Aunque no logró terminar, aunque Ashton y yo lo sacamos de encima antes de que fuera peor, sus manos ya la habían tocado. La había manoseado, la había humillado. Había intentado c