Escapando de un mal amor. Capítulo Mala interrupción
Al día siguiente.
Samuel abrió los ojos lentamente.
El peso de la resaca se le clavaba como un cuchillo en la sien.
El mundo giraba apenas, como si aún estuviera borracho. El primer pensamiento que lo golpeó fue el sabor amargo del arrepentimiento.
Se llevó una mano al rostro y, con dificultad, giró la cabeza hacia el otro lado de la cama.
Ahí estaba ella.
Deisy.
Su cuerpo estaba medio cubierto con la sábana, su cabello suelto, enredado, su expresión en calma, como si nada hubiese ocurrido.
Pero para Samuel, era todo lo contrario. Su corazón se aceleró de golpe. La rabia, el asco, la confusión se mezclaron en un torbellino que lo hizo sentarse de golpe.
—¡¿Qué demonios…?! —murmuró, sintiendo un escalofrío.
Deisy despertó sobresaltada al oírlo.
Se incorporó con lentitud, cubriéndose el pecho con la sábana al ver el gesto endurecido de Samuel.
—¡Deisy! —gritó él, con voz quebrada por la furia—. ¿Cómo pudiste hacer esto? ¡¿Por qué demonios estás en mi cama?!
La expresión de Deisy cambió d